5 pasos para superar la falta de confianza en uno mismo
¿Alguna vez te sientes vacilante, reprimiéndote en el trabajo por temor a ser considerada una impostora? ¿Te preocupa no ser tal vez lo suficientemente “buena” para conseguir el tipo de éxito con el que te ilusionas?
Todos sentimos esa falta de confianza en uno mismo alguna que otra vez
Si tu propia inseguridad te molesta, no eres la única. De hecho, en un estudio de gerentes realizado por el Instituto Europeo de Gestión y Liderazgo (European Institute for Leadership and Management) reveló que el 50% de mujeres en cargos ejecutivos y el 31% de hombres en iguales cargos reconocieron haber dudado de sí mismos.
«Lamentablemente cuando tememos que alguien pueda llegar a cuestionar nuestra propia capacidad [es porque] nos falta confianza para pasar de las ideas a los hechos», explica Louisa Jewell, especialista en psicología positiva, que ha investigado a fondo el tema de la falta de confianza en uno mismo.
Según Louisa, es posible superar la falta de confianza o inseguridad en uno mismo siguiendo estas estrategias:
- Fíjate en quién te rodea.
Tus redes sociales pueden aumentar o reducir tus propias inseguridades. Si estuvieras por emprender algo nuevo, asegúrate de que la gente que te rodea te respalde, sea comprensiva y te aliente a progresar.
- Céntrate en tu trabajo
En lugar de preguntarte “¿Cómo me veo con eso?” o “¿Qué ocurre si fracaso delante de esta persona ahora?”, concéntrate en cambio en lo que estás intentando generar, en la persona que estás intentando atender y en lo que te gustaría lograr. Intenta decir: “Solo estoy trabajando intensamente aquí y no me preocupa en absoluto lo que los demás puedan pensar de mí.”
- Desafía el parloteo negativo de tu mente.
Identifica y sé consciente de lo que te estás diciendo. Si notas que tus pensamientos son muy negativos y autocríticos, pues rebate lo que estás pensando preguntándote: “¿Será cierto?” En lugar de permitir que tu propia falta de confianza en ti se apropie irracionalmente de tus pensamientos, busca racionalmente pruebas para asumir un punto de vista más objetivo y equilibrado.
- Usa tus fortalezas.
Sé consciente de todas las cosas que te gusta hacer y que sabes que haces bien y aprovecha eso de manera consciente y deliberada para generarte confianza para actuar. Cuando uno recurre a sus virtudes o fortalezas internas, desaparece el temor de avanzar y eso te permite aprovechar la profunda convicción de que puedes lograrlo, y que tienes los recursos y habilidades necesarios para enfrentar nuevos desafíos.
- Ejercita la autocompasión.
Es importante que estés dispuesta a analizar tus propios errores y defectos con bondad y comprensión. No te juzgues con tanta dureza ni sientas la necesidad de centrarte, en actitud defensiva, en tus cualidades asombrosas para proteger tu ego. Acepta en cambio la realidad de que errar es humano. Intenta hacerte una idea más realista de tu propia capacidad y de tus actos y después, averigua qué necesitas cambiar la próxima vez.
Autora: Luisa Jewell